La incursión de Burger King en el mercado español en 1975 marcó un punto de inflexión significativo, no solo para la marca sino para el panorama de la restauración en Europa. España, un país percibido entonces como un terreno fértil para nuevas propuestas comerciales y con una población ávida de experiencias novedosas, se convirtió en la puerta de entrada para la cadena de hamburguesas en el continente. El 27 de junio de aquel año, el primer restaurante abría sus puertas en la emblemática Plaza de los Cubos de Madrid, sentando las bases de lo que se convertiría en una de…